Un Mensaje

Para aquellos de ustedes que piensan que ya no somos tan chepos o chistosos como antes, o que ya no les gusta leernos, les tengo una solución.

Quiero que se sienten antes de que les diga, porque yo sé que sus cerebritos subdesarrollados mal nutridos no son capaces de asimilar mucho cuando están ocupados pensando en unicornios y en la difícil labor de mantener el equilibrio para no caerse y romperse mas los sesos. Como yo sé que no es posible evitar que piensen en pendejadas, por lo menos puedo recuperar esa parte de su cerebro usada para estar de pie y utilizarla para hacer que mi mensaje llegue a ustedes.

¿Listos? Aquí va. Uno. Dos. ¡Tres!

¡NO ME LEAN, HIJUEPUTAS!

Déjenme explicarlo lentamente para aquellos de ustedes que son mas lentos que los otros.

“NO” es una palabra que indica que tienen que hacer todo lo contrario a lo que continúa en el resto de la oración; como en este caso que es “ME LEAN”. En otras palabras tiene que hacer lo completamente opuesto a leer mi blog. Aléjense de sus computadoras, salgan a la calle y conozcan gente nueva. Vayan al cine (pero no lleven el puto celular, o por lo menos apáguenlo). Llamen a un amigo de la escuela con el cual no han hablado desde hace años. Cojan un libro y léanlo, para que no sean unos pedazos de mierda sin cultura. Aprendan un nuevo idioma. Vayan de paseo a la playa. Mámenle el huevo a un perro muerto en la calle como hace ESPOL-Kid. No me importa, solo no nos lean.

“Hijueputa”, por cierto, significa que la madre que los parió vende sus favores sexuales por dinero.

Ustedes no nos hacen ningún favor leyéndonos. Si les gusta y les divierte, bien, y si no entonces váyanse a lamer verga nubiense. Este blog solo existe para un propósito, y ese propósito es hacer que Tijerón y yo nos caguemos de risa. Nosotros no ganamos nada de dinero escribiendo huevadas aquí, así que no piensen que ayudan a mantener a nuestros hijos bastardos en su tratamiento de diálisis o cualquier huevada.

Si no te gusta lo que lees, entonces lárgate solo por la sombrita, porque aquí no te necesitamos y nos vale una triste verga de John Petrucci que no te guste.