Jesús Fichamba.... behind the music.

Su vida. Su historia. Sus comienzos. Su Asenso. Su caída. Su triunfo. Su tragedia. Su vida contada por quienes lo conocieron. Jesús Fichamba... behind the music.

La primera aparición profesional del ídolo Fichamba ocurrió un 15 de Noviembre de 1984 en el show de Chispazos, cuando Fichamba era miembro del grupo de Aladino, el genio de la rockola maravillosa. Desde aquellos humildes comienzos se notaba que el joven indio rebelde daría mucho de que hablar: Inmediatamente se hizo notar sobre sus compañeros durante aquella presentación, cuando en una demostración de que tan “HARDCORE” era él, estrelló su rondador contra uno de los parlantes. Luego tomó a uno de los payasos de Chispazos, lo llevó al escenario, lo golpeó salvajemente; y, mientras este estaba tendido en el suelo de dolor, se bajó los pantalones y empezó a orinarse sobre su cara al grito de “¡Bebe chicha india, la chicha india JA JA JA JA JA!”

Al poco tiempo Fichamba, que sabía que era demasiado grande como para quedarse en ese grupo, abrió sus alas de Cóndor y se hizo al vuelo como solista. La fama nunca lo abandonó, pero tampoco el escándalo. En un concierto en Naranjito, realizó uno de sus mas célebres e infames actos. Jesús Fichamba, en pleno concierto le arrancó la cabeza con sus dientes a un Cuy, y luego bañó con su sangre a los espectadores. En otro concierto en Huigra, después de haber acabado una canción, Fichamba tomó una foto del Papa y dijo “Esta es la cara del enemigo” antes de romperla. Lo que mas extraña de este último acto no es que Fichamba odie al Papa, lo raro era que la foto no era de Juan Pablo Segundo, sino de Urbano décimo. Hasta hoy en día nadie sabe que mierda significaba eso. Estos dos actos llevaron a la iglesia católica a declarar a Fichamba como un “Satánico.” El hecho de que Fichamba, en su siguiente concierto en Lago Agrio, asesinara a una virgen en el escenario e invocara al demonio Necroshoggoth, señor del pozo de dolor indescriptible, el cual apareció y asesinó en un festín de sangre y tripas a los espectadores, no ayudó a que la iglesia cambie de idea.

Ya para 1987, la Fichambamanía estaba en auge, pero se divisaban problemas en el horizonte...

El guitarrista de Fichamba, Freddy Piyahuaso, nos narra: “Si... bueno... lo teníamos todo. Teníamos dinero, fama, mujeres, droga... todo lo que quisiéramos, pero la verdad... la verdad es que vivíamos con miedo cada minuto. Fichamba nos daba miedo. Él tenía unos gustos raros. De vez en cuando le llegaba por correo una revista porno de Pakistán con fotos de negros culeando un chancho muerto. A veces también le llegaba un polvo negro con el que se drogaba, y decía que estaba hecho de semen de fantasmas de personas que murieron ahogadas. Lo peor era las bromas que nos jugaba. Un día Fichamba regresó de un viaje, y traía en su mano una pistola. Fichamba le dijo al baterista que la tomara en sus manos y haga como que le disparaba a él. Luego Fichamba tomó de vuelta su pistola. Nos pareció raro que Fichamba llevaba guantes, ya que no hacía frío. Dos días después la INTERPOL metió en prisión al baterista y lo acusó de matar a un político en Paraguay, porque sus huellas estaban en el arma homicida. Todavía está en prisión.”

A mediados de 1988 Fichamba desaparece. Sus fanáticos buscaron desesperadamente, pero no lo pudieron encontrar. Pasaron mas de diez años, y la Fichambamanía solo existía en el recuerdo, pero en el 2001 Fichamba regresa. Nadie está seguro de donde se encontraba. Fotos de la CIA lo muestran viviendo con el Ayatolá Komeini en Irán, y al mismo tiempo trabajando de jefe en un campo de prisioneros en Serbia. Hasta se encontró una calavera en la selva de Borneo cuya dentadura concordaba con los registros dentales de Fichamba. Cuando se le preguntaba a Fichamba donde se encontraba, este solo se limitaba a reír tenebrosamente mientras se acariciaba los genitales.

Fichamba había regresado al ver lo popular que eran los grupos de adolescentes que cantaban música Pop como N’Sync y Backstreet Boys. Fichamba había creado un grupo para que cantara sus canciones, pero en una versión pop juvenil. Este grupo era Fichamba Teens.


Esta es la portada del único álbum de Fichamba Teens, titulado “Mas allá de la velocidad del corazón.”

Fichamba-Teens, también conocido brevemente como Fichamba-Way, tuvo una gran acogida. No... esperen... Me equivoqué, lo que tuvieron fue una gran cogida por el culo, ya que fueron tal fracaso que Fichamba, para recuperar parte del dinero invertido, los vendió como esclavos sexuales en África. Los expertos no están seguros de por que fueron un fracaso. Algunos dicen que es porque la pinta de rockeros de a verga ochenteros con pelo largo de metrosexual sin plata había pasado de moda. Otros decían que era porque los hijos de puta no eran teens, sino que tenían treinta años y eran unos cerdos guatones inmundos.

Después de tal fracaso, Fichamba desaparece por otro año. Como es usual, nadie sabe de su paradero hasta un febrero del 2003. Después de un voraz incendio en un motel de Sauces 5, se encuentra un cadáver irreconocible que tenía la billetera con la cédula de Fichamba, tres kilos de heroína, una bolsa con un polvo negro irreconocible, tres pistolas Baretta, y una carta sin enviar que solo decía “Batiduende y Tijerón, gracias por sus consejos.”

Dos días después, el cadáver es enterrado en el cementerio de Otavalo, el cual ahora se cree es el lugar de reposo final de Fichamba.