Mi Papá: Cuando yo tenía....

4 Años – ¡Mi Papá lo sabe todo!

5 Años – Mi papá no lo sabe todo. Por ejemplo, no sabe que mi mamá se culea al chofer. ¡Ja, ja, ja, que cojudo!

7 Años – Oye, Papá, mi mamá se culea al chofer porque dice que no se te para la verga. Ja, ja ,ja. Te ponen los cachos, viejo maricón.

7 Años + 1 Minuto – Verga... Mi viejo pega duro.

10 Años – Vales verga, tú no eres mi padre, mi mamá me contó que mi padre era el lechero. Vales verga, ¡ja, ja, ja, ja!

10 Años + 5 minutos – ¡Que arrecho! Corro mas rápido que mi viejo y me robé sus muletas.

12 Años – Maldito doctor hijueputa que sacó a mi padre de la silla de ruedas. Necesito una nueva estrategia.

15 Años - ¡Ja, ja, ja, ja! Ahora soy tan grande como tú, pero mas joven y mas rápido. Ahora te puedo sacar la chucha, impotente mama verga. Vamos a ver si te puedo volver a meter en la silla de ruedas.

16 Años – ¿Para qué volviste, cara de orto? Te saqué la puta una vez, y lo puedo volver a hacer... Oh, mierda... aprendiste Kung Fu... ¡NO, CHUCHA, PATADAS EN LAS BOLAS NO!

17 Años – Sí, Hijo de puta, volví, pero ahora traje una pistola. ¿De qué te sirve tu Kung Fu ahora, maldito huevón?

17 Años + 5 segundos – Ah... me volaste la pistola con una patada... vaya, si te sirvió el Kung Fu. Mierda, estoy jodido. ¡NO, CHUCHA, PATADAS EN LAS BOLAS NO!

18 Años – Verga... algún día volveré a caminar y te sacaré la chucha, viejo de a verga... Algún día...

20 Años – Voy a caminar. Voy a caminar. EL ODIO ES MI GASOLINA, Y YO CAMINARÉ HACIA MI VENGANZA.

23 Años – Vamos a ver si el Kung Fu te defiende de la bomba que puse en tu carro, maldito.

23 Años + 10 minutos - ¿Qué el carro de mi viejo no era la camioneta azul? Oh, mierda... espero que nadie vaya a extrañar a ese par de monjas.

30 Años – ¡Ja, ja, ja! Ahora tienes cancer. ¡TOOOOOMAAAA!

35 Años – ¿Puta, sigues vivo? Ya muerete, chucha de tu madre.

37 Años - Ya no tienes plata para la quimioterapía, TE JODISTE ¡JA JA JA JA JA JA!

38 Años – Hasta que al fin pagaste, mira como bailo sobre tu tumba, ¡ja, ja, ja, ja! Y mira ahora como me orino sobre tu lápida, ¡ja ja ja ja ja!

65 Años – Vaya... cuanta razón tenía mi viejo.