Por qué Supersize Me hablaba huevadas.

Crítica de Película

Título: Supersize Me.

Actores: Es un documental, pendejo.

Director: Morgan Spurlock.

El tema surgió hace ya algunas semanas cuando hablé de la película Bowling for Columbine de Michael Moore, pero no había tenido tiempo de rayar esta película como se debe.


Así también te atragantas de verga, pendejo.

La idea de la película es investigar si comer hamburguesas y papas fritas te hacen chancho. ¡Oh, chucha de tu madre! ¿Cuál es tu siguiente documental, ver si el agua es mojada?

Aparentemente, un par de gringas iban a McDonalds a comer todos los días, y misteriosamente se engordaron y quedaron cerdas. ¡OH NO! Como el cerebrito de este par de súper-fofas se usa al cien por ciento para pensar en jamón y pasteles, no se les ocurrió que tal vez, tan solo tal vez, el hecho de que hayan ido a McDonalds a rellenarse de comida grasosa todos los días haya sido su culpa. Este par de ballenas de tierra firme terminó demandando a McDonalds. Gracias a Yoda, el juez se dio cuenta de que eran un par de imbéciles y McDonalds no tuvo que pagarles nada. Aquí entra Morgan Spurlock, director de Supersize-Me, que no puede creer que un juez no le obligue a una de esas malvadas corporaciones a darle billete a un par de morsas por haberse engordado.

Mi argumento de por qué McDonalds no le tiene que pagar un céntimo a las reinas de chanchilandia es muy sencillo y se resume en lo siguiente:

¡McDONALDS NO ES TU MAMITA, CERDA DE MIERDA!

McDonalds no tiene por qué andarte cuidando. McDonalds solo tiene una actividad, y esa es vender comida. Con tal que no pongan ratas muertas con peste bubónica en las hamburguesas y diarrea con cólera en las papitas, como lo hace El Galeón, entonces no tienes de que quejarte. Si yo utilizara la misma falta de lógica que usaron ese par de chanchas, entonces podría irme a la tienda, comprarme unas tarrinas de manteca y solo comer eso por un mes. Cuando me haga un super-cerdo entonces demando a los fabricantes de margarina, uso la plata para una liposucción y utilizo el resto para construirme un Mazinger como siempre quise. Pero el mundo no es tan imbécil como esas gordas y Morgan Spurlock quisieran, así que eso no va a pasar.


Gorda se trata de comer a si misma. Noticias a las ocho.

Sí, la comida de McDonalds no es saludable, pero por algo es comida chatarra. ¿Podrían ellos hacer su comida más saludable? Claro que sí. ¿Pero qué Nazi de la salud nos va a decir que tan saludable debe ser? En primer lugar, ningún plato de comida del mundo tiene TODOS lo nutrientes que el ser humano necesita. Por razones obvias, las hamburguesas y papas fritas menos que la mayoría. Pero eso es lo que vende Mcdonalds. ¿Qué culpa tienen ellos que un cerro de cerdos solo coman eso en sus locales? ¿Qué pueden hacer? ¿BOTARLOS? Ahí si los demandan por discriminar a los gordos. No solo que es imposible hacer esto, si no que no se debe hacer. Cada gordo es libre de atragantarse con lo que quiera. Y para rematar la estupidez de todo este lío, mientras McDonalds y otras cadenas de comida rápida hicieron mas saludables sus comidas por culpa de la mala publicidad que les trajo este documental, Burger King sacó la hamburguesa mas grasienta y llena de calorías del mundo. Esta hamburguesa es prácticamente un cerro de grasa pintado como hamburguesa, y se vendió como pan caliente; porque a los gordos les encantó. A los gordos les importa un bledo lo que digan los nazis de la salud, se quieren morir a los treinta años de un paro cardiaco, y están es su completo derecho de vivir sus vidas como les dé la gana. Morgan Spurlock no es su mamita, y no tiene por qué andar cuidándolos. McDonalds mucho menos.

Y en segundo lugar: ¿Cómo mierdas vamos a hacer saludables todas las comidas? ¿Acaso las tiendas que venden pasteles de chocolate tiene que hacer pasteles de chocolate saludables? ¿Cómo chucha van a hacer eso? Hay comida que no es saludable, y no hay forma de hacerla saludable.

Y algo que me cabreó de esta película fue la escena donde Spurlock se burla de su novia, que era una bobita vegetariana que se le ocurrió compara comer carne con inyectarse heroína. La verdad es que es la pobre es una bobasa y merece ser humillada ante una audiencia en cualquier oportunidad, pero luego el pendejo de Spurlock compara la comida de McDonalds con las drogas y hasta dice que es adictiva. Espero que tu novia se haya fugado con un negro y te haya dejado botado por hipócrita. ¿Cómo es esa pendejada de que la comida de McDonalds es adictiva? ¿Qué es esa estupidez? Yo he comido en McDonalds y sinceramente no he tenido ganas de regresar, y el buen doctor Krapowski me cuenta de que ese no es el caso cuando fumas crack.

Después hay una pendejada donde el man dice que los estudiantes de colegio son violentos porque comen comida chatarra, pero no muestra ninguna huevada que lo compruebe, excepto que existe un colegio por ahí donde comen bien y no se andan matando a puñetes. No solo que las hamburguesas de Mcdonalds son hechas con cocaína, si no que también te convierten en pandillero.


¡AAAAAAAHHHHH! ¡Sáquenla de mi Internet! ¡Un millón de dólares a quien la saque de mi Internet!

El documental de mierda este solo tiene dos puntos válidos de los cuales me acuerdo.

El primer punto es que McDonalds no pone los carteles que indican los nutrientes de cada comida. Nadie nunca lee esas huevadas, pero igual siempre deberían ponerlos para que las personas tengan la opción de ver que tanto se van a encerdar si comen ahí.

El segundo punto ni siquiera sale en el documental, solo lo puedes ver si tienes el DVD. Está en la sección de extras y escenas borradas. Este man de Spurlock se compró unas papas fritas y hamburguesas de McDonalds, y unas papas y hamburguesas de un local cualquiera que no es de una cadena. En una semana, las papas y la hamburguesa del local cualquiera se pudrieron, pero la comida de McDonalds seguía como si nada. Después de un mes, las hamburguesas de McDonalds se pudrieron, pero las papas de McDonalds eran papas highlander y seguían igualitas. Pasaron otros meses y esas papas no se pudrían por nada del mundo. El punto es que McDonalds utiliza tantos químicos que esas papas eran prácticamente papas momificadas, y que ya no cuentan ni como comida.

Eso es todo.